Aunque parezcan un artículo básico en el que muchas veces no reparamos, las bisagras son fundamentales para todo tipo de muebles, puertas y ventanas. Sin ellas, simplemente no podríamos abrir nuestras puertas, es por eso que, aunque puedan pasar desapercibidas, debemos de valorar su importancia en muebles y construcción.
Por si fuera poco, existen diferentes tipos de bisagras en el mercado, las cuales se adaptan a diferentes tipos de usos como ventanas, puertas, paneles y muebles. Aquí te hablaremos de un tipo de bisagra único, el cual es muy usado por todos los beneficios que ofrece.
¿Qué son las bisagras de cazoleta?
Conocidas como bisagras de cazoleta, este tipo de bisagras para muebles tiene un diseño específico que está conformado por dos partes. La primera es la bisagra como tal, la cual cuenta con una cazoleta que albergará al resorte de la bisagra cuando esta se cierre.
La segunda parte es la base la cual se empotra en el mueble mediante tornillos. Su diseño, a diferencia de las bisagras normales, utiliza un resorte, así como un brazo para hacer que el cierre sea mucho más fácil y cómodo, e incluso automático. Además, de que estas bisagras pueden ocultarse y no son visibles desde el exterior.
El nombre “bisagra de cazoleta” proviene de la forma de la cabeza de la bisagra. Esta posee una cavidad rectangular que la hace similar a una cazoleta en tamaño reducido.
¿Dónde se usan las bisagras de cazoleta?
El uso principal de las bisagras de cazoleta está dirigido a las puertas de muebles. Y es que, al no verse desde a fuera y al ser tan cómoda de usar, estas bisagras les dan un toque mucho más estético a estos. La cazoleta se empotra en la puerta del mueble para ejecutar la apertura y esconder parcialmente el herraje.
Las bisagras de cazoleta tienen una amplia variedad de aplicaciones al poseer una gama muy amplia de variaciones. La primera caracterización son sus grados de amplitud, este tipo de bisagras para puertas puede encontrarse en rangos de 90 a más de 150 grados de amplitud. A mayor amplitud, la puerta dispondrá de una apertura mayor. Entre las marcas más representativas podemos encontrar bisagras Salice, bisagras ALK y Ferrari.
Tipos de bisagras de cazoleta
En el mercado podemos encontrar diferentes tipos de bisagras de cazoleta, las cuales están diseñadas especialmente para adaptarse a tus muebles tanto en tamaño como en forma. A continuación, explicamos cuáles son los 4 tipos principales de bisagras de cazoleta para bricolaje y carpintería:
Bisagra recta
La bisagra recta es el diseño más simple de bisagras. Su montaje es sencillo y se recomienda principalmente para puertas que tienen una ubicación exterior al lateral del mueble. Es decir, cuando la puerta tapa en su totalidad el canto lateral del mueble quedando esta por encima de la estructura.
Bisagra acodada
Diseñada para ángulos más marcados y espacios reducidos, esta bisagra se usa principalmente cuando la puerta es intermedia, es decir, cuando la puerta tapa la mitad del canto lateral al quedar por fuera de los bordes. Su nombre lo recibe por su característica forma con codo o en L.
Bisagra superacodada
Este diseño se utiliza cuando la puerta es interior, es decir, cuando la puerta queda dentro de la estructura del mueble quedando el canto lateral a la vista. Además, su diseño hace que la puerta pueda abrir en ciertos ángulos más cerrados.
Además de los tres tipos de bisagras mencionadas con anterioridad, existen un tipo de bisagra de cazoleta, pero sin cazoleta: bisagra sin cazoleta. Esto es debido a que en lugar de tener un espacio interior el cual requiere de fresado, esta bisagra tiene un mecanismo complejo interior con un amortiguador para darnos el mismo funcionamiento que la bisagra con cazoleta.
Ventajas de las bisagras de cazoleta
Estas bisagras tienen una gran cantidad de beneficios. Aquí te contamos cuáles son los mejores para que te decidas a usar las bisagras con cazoleta en tus muebles de baño, cocina o incluso para tu habitación.
Son invisibles
Una de las principales ventajas de estas bisagras es el hecho de que son prácticamente invisibles desde el exterior al abrir y cerrar la puerta. Esto se debe a que las bisagras se ocultan en la cazoleta al cerrar haciendo que la misma puerta las cubra lo que evitará que se vean y sean poco estéticas.
Versátiles
Estas bisagras de cazoleta están hechas para ser muy versátiles, ya que se pueden adaptar fácilmente a todo tipo de muebles y diseños. Además, se pueden montar en diferentes tipos de materiales como madera natural de diferentes densidades y materiales más sintéticos como melamina. Además, su variedad de grados de apertura permite al usuario elegir un tipo de bisagra de cazoleta que se adapte a las sus peculiaridades.
Resistente
Otra ventaja de usar este tipo de bisagras es su resistencia. El mecanismo interior soporta muy bien el movimiento y peso de la puerta, por lo que no tendrás que preocuparte por reemplazarla. La base y cazoleta están hechas para ser muy duraderas y su anclaje ofrece una gran estabilidad al montarla.
¿Cómo elegir la mejor bisagra con cazoleta?
Para seleccionar las mejores bisagras con cazoleta en una ferretería online, debes de tomar en cuenta ciertos puntos. Lo primero es el tipo y forma de la puerta, si esta tiene apertura lateral, hacia izquierda o derecha, o es abatible para arriba o abajo. También debes tener en cuenta si la puerta se podrá abrir mucho o poco, especialmente para determinar los grados de apertura de la bisagra.
Además, te recomendamos considerar el tamaño de la bisagra, si es grande o si es pequeña, así como la capacidad de carga. El diseño, color y materiales son otros factores que también te recomendamos considerar.
La instalación de las bisagras con cazoleta
Instalar las bisagras con cazoleta dependerá de dos cosas, en primer lugar, del tipo de bisagra con cazoleta y en segundo del lugar de instalación, aunque el proceso en general es similar. Tendrás que instalar uno de sus lados en la puerta y otro en el mueble. Este proceso se puede ejecutar mediante el uso de una fresadora o con una bisagradora semiautomática, la cual incremente significativamente la capacidad para poner bisagras en sus respectivas puertas.
Por lo general, la base y cazoleta se instalan en la estructura del mueble, mientras que el soporte se añade o se monta en la puerta. Sencillamente, solo bastará con unos cuantos tornillos y un desatornillador para poder colocar las bisagras con cazoleta fácilmente.